La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) clasificó como “reservada por un periodo de cinco años” la información relativa al número de elementos, sus rangos, vehículos y armas utilizadas para darle protección al presidente municipal de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco Bravo, por considerar que hacer públicos esos datos “pone en riesgo la seguridad la seguridad e integridad del personal militar”.
Lo anterior, luego de que realizó una solicitud de información pública al Ejercito Mexicano para conocer el costo que representa destinar un grupo de elementos armados a bordo de vehículos militares, para ser utilizados de manera permanente como escoltas de un presidente municipal.
También, se solicitó que la Sedena informara la razón legal o criterio para asignar una escolta militar al ex futbolista Cuauhtémoc Blanco, quien ganó las elecciones de junio del 2015 y asumió el cargo de presidente municipal desde el primero de enero de este año.
Sobre esto último, la Unidad de Transparencia de la Sedena contestó que “el servicio de escolta que se le brindó al C. presidente municipal de Cuernavaca, fue con motivo de una solicitud realizada por el gobierno del estado de Morelos a la Secretaría de Gobernación”.
Por cuanto al número de elementos, rangos, vehículos y armas, el subjefe operativo del Estado Mayor de la Defensa Nacional, General de Brigada Javier Cruz Rivas, resolvió la clasificación de reserva de la información por cinco años, en virtud de que “al hacer pública esta información, la delincuencia organizada podría deducir los efectivos de personal, cantidad de armas y calibres en actividades que desarrolla personal militar, con lo cual estaría en condiciones de emplear efectivos superiores a los empleados en dichas actividades, así como materiales tecnológicos de mejores características a las que cuenta el Instituto Armado; con lo que se estaría poniendo en riesgo la integridad física del personal militar que desarrolla este tipo de comisiones”.
Cabe recordar que Cuauhtémoc Blanco sostuvo un abierto enfrentamiento con el gobernador del Estado, GracoRamírez Garrido Abreu por la negativa del alcalde de aceptar que la Policía del Mando Único se hiciera cargo de la seguridad de Cuernavaca.
De manera unilateral (y tomando como argumento principal el asesinato de la alcaldesa de Temixco, Gisela Mota Ocampo), el gobierno de Gracopublicó un decreto donde imponía “por causas de fuerza mayor” el Mando Único en 15 municipios de la entidad, entre ellos Cuernavaca.
Luego de una reunión en la Secretaría de Gobernación, el ex futbolista aceptó al Mando Único y regresó custodiado por dos vehículos (por lo menos) del Ejército Mexicano, mismos que lo acompañaron incluso a entrenar a las instalaciones del Club América, y luego al Estadio Azteca donde tuvo un partido de despedida.
