Ecosistema de suma importancia como refugio de la ballena gris, especie emblemática sujeta a protección especial
– Continuo levantamiento de censo anual de este cetáceo desde hace 21 años en las lagunas Ojo de Liebre y Guerrero Negro
La Reserva de la Biósfera Complejo Lagunar Ojo de Liebre ofrece en sus aguas las condiciones idóneas de batimetría, temperatura y salinidad a la ballena gris (Eschrichtius robustus), especie que arriba ahí cada año para su apareamiento, nacimiento y crianza de ballenatos.
Este 14 de enero se cumplen 47 años del decreto que establece como zona de refugio para ballenas y ballenatos el Complejo Lagunar, de acuerdo con el decreto presidencial expedido en 1972, que declara Zona de Refugio para Ballenas y Ballenatos las aguas del área de la Laguna Ojo de Liebre-Guerrero Negro, al sur de la Bahía de Sebastián Vizcaíno, en el Litoral del Océano Pacífico, en el estado de Baja California Sur.
Este mamífero marino está incluido con la categoría de Protección Especial en la NOM-059-SEMARNAT-2010, no obstante que a febrero de 2015 la población del cetáceo sumaba 2,305 ejemplares, de acuerdo con el censo de la ballena gris que se realiza desde hace 21 años en las lagunas Ojo de Liebre y Guerrero Negro, donde el notable crecimiento en el número de crías y adultos coloca al cetáceo fuera del peligro extinción.
Por tratarse de un área natural protegida marina prácticamente en su totalidad, en este complejo lagunar no existen localidades ni población humana, y solo se desarrollan actividades de pesca y de turismo de bajo impacto ambiental orientadas a la sostenibilidad para evitar que interfieran con el hábitat de Eschrichtius robustus.
Además de la ballena gris, en la Reserva existen 130 especies de aves, 79 de las cuales se han identificado en ambientes acuáticos naturales y antrópicos, y también es hábitat para otras especies con alguna categoría de riesgo, según la NOM-059-SEMARNAT-2010, como los pelícanos café, pardo, moreno y gris, y el ganso de collar, entre las especies con categoría de amenazadas, y el halcón peregrino, sujeto a protección especial.
Esta ANP es zona relevante de pesca de importancia comercial para especies como la langosta roja, callo de hacha, almeja chocolate, almeja mano de león, almeja catarina, pulpo, pata de mula y caracol panocha, entre otras.