El Acuerdo de París es la respuesta del planeta contra el cambio climático
Ante la Organización de las Naciones Unidas México ratificó junto con 29 naciones el Acuerdo, el cual deberá cumplir con dos condicionantes para su entrada en vigor: ser ratificado por al menos 55 países y que éstos representen al menos 55% de las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) globales.
¿En qué consiste el Acuerdo de París?
Es un Acuerdo jurídicamente vinculante, sucinto, universal, durable, con metas de largo plazo, dinámico, con compromisos claros, da relevancia tanto a la mitigación como a la adaptación, reconoce el papel de los bosques y está acompañado de una decisión con un plan de trabajo 2016-2020.
Compromete a todos los países a trabajar unidos para mantener la temperatura global por debajo de los 2°C grados centígrados, con miras a lograr que no rebase los 1.5 grados centígrados.
Contiene una meta global de adaptación de largo plazo para incrementar la capacidad adaptativa, fortalecer la resiliencia y disminuir la vulnerabilidad al cambio climático.
Incorpora la visión para lograr que los flujos financieros sean consistentes con un modelo de desarrollo resiliente y de bajas emisiones de Gases de Efecto Invernadero.
Pone en marcha un esquema fortalecido de provisión de financiamiento, desarrollo y transferencia de tecnología y de construcción de capacidades, para apoyar a los países en desarrollo en la aplicación de sus medidas, buscando un balance entre mitigación y adaptación.
A partir del 2023 cada 5 años se hará una evaluación de las contribuciones previstas determinadas a nivel nacional (INDC) de mitigación y adaptación al cambio climático, para que los países incrementen sus compromisos.
Reconoce que al emprender acciones climáticas, los países deberán respetar, promover y considerar sus obligaciones sobre derechos humanos, igualdad de género e intergeneracional.
Incluye un artículo operativo para fomentar la cooperación en materia de educación, entrenamiento, concienciación y participación pública.
Para el cumplimiento de este Acuerdo, México alista acciones concretas
Alcanzar una tasa cero de deforestación.
Mejorar la capacidad adaptativa de los 160 municipios más vulnerables.
Proteger a la población de los fenómenos hidrometeorológicos extremos.
Aumentar la resiliencia de la infraestructura estratégica del país y de los ecosistemas.
Desacoplar el crecimiento económico de la emisión de contaminantes de efecto invernadero.