Festeja 16 años como área natural protegida neoleonesa de alta biodiversidad.
El Parque Nacional Cumbres de Monterrey (PNCM) abarca 177,395 hectáreas de superficie en la parte norte de la Sierra Madre Oriental. La Comisión Nacional para el Estudio y Conocimiento de la Biodiversidad (CONABIO) lo ha clasificado como región terrestre prioritaria y también está considerado como un área de importancia para la conservación de las aves.
Vegetación: Alberga a las comunidades vegetales de mayor valor ecológico de Nuevo León, principalmente bosques de pinos y encinos, así como pastizales y diversas composiciones florísticas a lo largo de los ríos y cañadas.
Fauna: Se han registrado 1,368 especies de flora y fauna en el parque, 73 consideradas en peligro de extinción, amenazadas, endémicas o bajo protección especial. Entre otras, destacan el coyote, el puma, el tejón, el mapache, el venado Cola Blanca, el tlacuache, el armadillo, el jabalí, la zorra Gris, la liebre, las ardillas Gris y Roja, la cotorra Serrana Oriental, el carpintero Arlequín, el pato Arcoiris, el cardenal, el halcón Pálido, el halcón Peregrino y el jilguero Americano.
Servicios ambientales: El PNCM es fundamental para la región porque produce alrededor del 70% del agua que consume la ciudad de Monterrey, tercera ciudad de México por su densidad poblacional.
Servicios turísticos: cuenta con diversos parajes idóneos para que los amantes de la naturaleza realicen actividades de ecoturismo, bicicleta de montaña, rapel, etcétera.
Cumbres de Monterrey fue decretada como área natural protegida con el carácter de parque nacional el 17 de noviembre de 2000 y pertenece a la Red Mundial de Reservas de Biosfera desde septiembre de 2006.