De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, casi una docena de países, la mayoría proveniente del continente africano, aún no reciben alguna dosis de los antígenos disponibles.
Yamena Chad, es uno de estos países donde sencillamente no hay ninguna vacuna ni siquiera para los médicos y enfermeras que atienden a pacientes de COVID-19 en Chad, uno de los países menos desarrollados del mundo y que tiene un tercio de su territorio en el Desierto del Sáhara.
Las naciones más adineradas, acumulan vacunas de reserva para todos sus ciudadanos, mientras los países más pobres siguen en la lucha por conseguir una dosis; unos pocos, como Chad, aún no han recibido ninguna.
“Estos países, son los más rezagados en la campaña de vacunación contra el Covid-19, y el continente supone apenas el 1% de las vacunas administradas en todo el mundo”, advirtió la OMS el pasado jueves.
La situación es un foco de atención, pues estos países tienen altas posibilidades de que puedan surgir nuevas y preocupantes variantes, indicó Gian Gandhi, coordinador de la División de Suministro de COVAX en UNICEF.
“De modo que todos debemos preocuparnos por cualquier falta de cobertura en cualquier lugar del mundo”, indicó Gandhi, que instó a los países con más ingresos a donar dosis a los países que siguen esperando.
Cabe señalar que, el total de casos confirmados por el virus en estos países es realmente bajo, sin embargo, la realidad es que también es incierto, ya que, la mayoría de estos países no cuentan con lo necesario para monitorear los contagios.
Tal es el caso de Chad, que solo ha confirmado 170 muertes desde el inicio de la pandemia, y los esfuerzos puestos en la prevención del contagio no han tenido mayor éxito, Médicos Sin Fronteras ayuda a suministrar oxígeno para los pacientes de COVID-19 y el hospital tiene 13 respiradores. Los médicos también tienen desinfectantes de manos y muchas mascarillas KN95 de fabricación china. Pero ni uno solo de los empleados está vacunado y a ninguno le han dicho cuándo podría ocurrir eso.
COVAX, el programa que respalda Naciones Unidas para llevar vacunas contra el COVID-19 a todo el mundo, pretende ayudar a los países de bajos y medios ingresos a conseguir accesos a las dosis, sin embargo, unos pocos países, como Chad, han expresado su preocupación por recibir la vacuna de AstraZeneca a través de la plataforma, porque temen que no proteja contra una variante del virus identificada por primera vez en Sudáfrica.
Además de los problemas de suministro, Chad también tendrá que enfrentar un desabasto económico, ya que tendrán que habilitar las instalaciones de refrigeración necesarias para conservar la vacuna en un país donde las temperaturas alcanzan cada día los 43.5 Celsius.