La NASA anunció este lunes que adjudicó un contrato por 20 millones de dólares a la compañía Lockheed Martin para que desarrolle un diseño preliminar de un avión de pasajeros más silencioso designado para volar más rápido que la velocidad del sonido.
El avión usará la llamada tecnología ‘Quiet Supersonic’, o QueSST, para crear un “latido” supersónico, una especie de golpe suave en lugar de las molestas explosiones sónicas por lo general asociadas con los aviones supersónicos.
El proyecto es el primero de la serie de aviones de la NASA —conocidos como “X-planes”—que hacen parte de la iniciativa conocida como New Aviation Horizons.
El objetivo es hacer “vuelos más ecológicos, seguros y tranquilos; todo esto mientras se desarrolla un avión que viaje más rápido y se construye un sistema de aviación que opere más eficientemente”, dijo el funcionario de la NASA Charles Bolden durante el anuncio oficial que hizo el lunes en el Aeropuerto Nacional Ronald Reagan de Washington en Arlington, Virginia.
Las explosiones sónicas provienen de las ondas de choque que se crean cuando los aviones supersónicos avanzan a través del aire. Las ondas causan cambios repentinos en la presión del aire que desencadenan sonidos que pueden ser oídos a kilómetros de distancia.
El pasado mes de enero, las explosiones sónicas de las pruebas de los nuevos aviones de combate de la Marina —los F-35C— sacudieron la costa este de Estados Unidos. Las reacciones al sonido inundaron las redes sociales.
La NASA llama a su diseño de explosión sónica más silencioso, una tecnología low boom. La agencia ha estado trabajando con los ingenieros aeronáuticos del legendario Skunk Works de Lockheed en Palmdale, California, lugar de nacimiento de los icónicos diseños de aviones como el SR-71 Blackbird de vigilancia de la Fuerza Aérea y el avión de ataque Nighthawk F-117.
Junto con la NASA y Lockheed han trabajado en aprender cómo «sintonizar» o «darle forma» los estampidos sónicos del avión a través de su diseño.
“Estamos confiados en que nuestra solución de tecnología de vuelo low boom cumple con los requerimientos de la misión”, dijo el lunes en un comunicado Rob Weiss, manager general y vicepresidente ejecutivo de Skunk Works.
Algunos de los conceptos de diseño low boom de la NASA incluyen aviones con fuselajes lisos, nariz puntiaguda, alas delta o alas en flecha, una forma común en los aviones de alta velocidad.
Los viajes comerciales de vuelos supersónicos finalizaron cuando los concordes de British Airways y Air France dejaron de volar en 2003. Los aviones dejaron de tener beneficios después de un accidente en París en el año 2000 donde murieron 113 personas.
Estos aviones usaban bastante combustible, requerían partes especiales y un mantenimiento constante. El ruido de los concordes tenía un amplio conjunto de restricciones para volar casi en cualquier lado, excepto sobre el océano.
Pero el sentido de estatus, entusiasmo y romance del viaje en aerolíneas supersónicas no se detiene. Al parecer cada mes hay un diseño de un nuevo avión supersónico. El año pasado, un grupo llamado “Club Concorde” dijo estar recolectando dinero con la esperanza de poner en los cielos un concorde que había sido dado de baja.
Los vuelos supersónicos obviamente disminuirían el tiempo de los viajes en incontables rutas en todo el mundo.
Dependiendo del presupuesto, la NASA dijo que espera que el diseño y la construcción de esta primera fase del avión puede durar varios años, y que empezará la campaña de vuelo en 2020.
“Han sido casi 70 años desde que Chuck Yeager rompió la barrera del sonido en el Bell X-1 como parte de la investigación de alta velocidad de nuestra agencia predecesora”, dijo Bolden. “Ahora continuamos el legado supersónico del X-plane con este diseño preliminar de un avión supersónico más tranquilo con miras hacia el transporte de pasajeros”.