Los huevos de las aves, culturalmente, han formado parte de la alimentación humana, son un alimento nutritivo, versátil y al alcance de todos, y su producción es una actividad altamente rentable.
Pero… ¿cómo se forma un huevo? En este caso hacemos referencia al huevo de gallina. Éste se forma a partir de un óvulo de gallina (la yema), que se recubre de material nutritivo y de protección (clara y cáscara) antes de la puesta. El huevo permanece en el útero de 18 a 22 horas tiempo en el que se forma el cascarón.
El huevo es uno de los alimentos más completos que existen, sirve para elaborar ricos y diferentes platos, y para hacerlos más apetitosos porque les da un color, olor y sabor especial. Lo puedes comer de muchas maneras: fritos, revueltos, en tortilla, tibios, cocidos, asados…También en riquísimos postres como flanes, bizcochos, turrones, etcétera.
Actualmente, se están produciendo huevos a partir de gallinas alimentadas sin químicos nocivos, en condiciones de bajo estrés y respetando sus ciclos naturales con el fin de conquistar el mercado de los productos orgánicos, y obtener mejores ganancias.
En México la producción de huevo orgánico se realiza principalmente en dos entidades, Nuevo León con 31,250 kilogramos y la Ciudad de México que produce 138,601 kilogramos.
Sabías que…
Una gallina pone entre 250 y 279 huevos cada año.