La acentuada caída de la producción y de las ventas de automóviles en Brasil en los primeros cinco meses del año afianzaron a México como mayor fabricante de autos de América Latina, según datos divulgados hoy por ambos países.
El presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores de Brasil (Anfavea), Luiz Moan Yabuki, presentó este lunes en Sao Paulo los resultados de la industria entre enero y mayo, que reflejan claramente la profunda desaceleración de la séptima economía del planeta.
La venta de vehículos cayó 20.9 por ciento interanual en los cinco primeros meses del año, mientras la producción retrocedió 19.1 por ciento en el mismo período, según la Anfavea.
Moan Yabuki, quien preside el mayor lobby automotriz de Brasil, dijo que este «empeoramiento» de los resultados en el sector se debe a la «caída del índice de confianza del consumidor», ante un escenario de ajuste fiscal gubernamental y económico por el momento indefinido.
«Las ventas de autos en mayo fueron equivalentes a las del mismo mes de 2007, por lo que volvemos ocho años atrás, mientras que la de camiones retrocedió hasta 2003, es decir, 12 años atrás», dijo Moan Yabuki, quien estimó que esta situación es «coyuntural».
Prácticamente todos los datos del sector que recortó 14 mil empleos en los últimos 12 meses- son en negativo, excepto las exportaciones, que venían de un nivel muy bajo y crecieron un 12.6 por ciento interanual.
Buena parte de esa tendencia corresponde al aumento de las ventas de autos brasileños a México, que crecieron un 75 por ciento en volumen (18 mil unidades entre enero y mayo) y un 71 por ciento en valor (160 millones de dólares), impulsadas por el dinamismo del mercado interno mexicano, que acumula en 2015 un crecimiento del 20 por ciento.
En este escenario, Brasil prevé producir este año 2.5 millones de vehículos, un 17.8 por ciento menos que el año pasado, cuando México se alzó por primera vez como primer productor de América Latina.
Si la situación en el país sudamericano es de profunda desaceleración, con unas 25 mil personas en régimen de lay off y vacaciones no remuneradas en las fábricas del país por la falta de actividad económica, las montadoras en México enfrentan un escenario diametralmente opuesto, con récords históricos de ventas, exportación y producción.
La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) reportó hoy una producción de enero a mayo de 1.42 millones de vehículos ligeros, un 8.4 por ciento más que en el mismo período del año pasado, por apenas 1.09 millones en Brasil.
«La producción de vehículos ligeros ha superado sus mejores niveles históricos, tanto para el mes de mayo como para su acumulado», destacó la AMIA, que dijo que «la exportación también mantiene cifras récord», con un aumento del 11.5 por ciento en los primeros cinco meses de 2015.
La exportación a Estados Unidos y Canadá «destino del 81 por ciento de los autos vendidos al exterior por México- se sigue manteniendo como el gran motor de la industria automotriz mexicana, a diferencia de Brasil, muy focalizado en su sector interno por su falta de competitividad y acuerdos comerciales».