BURÓ POLÍTICO/ LASTRE TRICOLOR
POR ARIEL VILCHIS
La dosis de optimismo que trajo René Juárez Cisneros, presidente Nacional del Partido Revolucionario Institucional en su reciente visita a Baja California Sur, al parecer llega tarde.
La medicina para el enfermo llegó a destiempo, y es que para los priistas sudcalifornianos el desaseo de su actual dirigencia que encabeza Gabriela Cisneros Ruiz, títere de su jefe político el senador Isaías González Cuevas, tiene al tricolor en fase terminal. Por eso el mensaje de su líder nacional fue claro en el sentido de que deben trabajar Unidos, de que deben trabajar de la mano dejando de lado el divisionismo que impera al interior de la que fuera una estupenda maquinaria electoral. Que como dice la canción, sólo el recuerdo queda.
Y es que si Gabriela Cisneros tiene 3 dedos de inteligente se habrá dado cuenta que el mensaje fue para ella y el grupúsculo que opera el interior de su comité, debido a lo socavado que mantienen al PRI de Baja California Sur lo cual es ahora de conocimiento del dirigente nacional.
Sin duda, lo dicho por Juárez Cisneros ante la militancia priista en el sentido de hacer un llamado al voto parejo, a votar por todos los candidatos tricolores sin promover el llamado voto útil o medio voto, le calóhondo a una dirigente estatal que tiene el antecedente de promover para causas distintas al PRI el voto ciudadano.
Lo cierto es que en el esquema de la nueva dirigencia nacional de Rene Juárez no tiene cabida en el PRI, en función de su incompetencia, Gabriela Cisneros Ruiz. Quien en un acto de congruencia debería renunciar al PRI de manera inmediata y concentrarse en hacer campaña. A ver si así, de ese modo, logra los votos suficientes que la lleven al congreso de la unión de manera plurinominal. Lo cual dudo.
Todo lo anterior se desprende de ese lastre que representa para el PRI Gabriela Cisneros y su inútil intentona de dirigir al Revolucionario Institucional en un momento de su historia en el que se ocupa de un verdadero liderazgo y no la simulación y traición de la actual pseudo líder Gabriela Cisneros. Lo que da como resultado una derrota estrepitosa de su partido.
Como lo mencioné líneas arriba, la medicina llega tarde. Hacía falta que un líder nacional les hablara con el lenguaje de Rene Juárez. Hacía falta que un verdadero priista se acercara a las bases tricolores, hacía falta que les recordaran sus orígenes, de quéestán hechos y de lo que son capaces. Lamentablemente para el PRI el enemigo está en casa y luchan contra reloj. Gabriela Cisneros es un lastrey la percepción ciudadana le da la espalda al partido que gobernó al país por más de 70 años.
A la mitad de la campaña electoral local y a menos decuarenta días para la jornada electiva, veremos para qué les alcanza a los priistas. Veremos de qué están hechos, veremos si la percepción se impone a la realidad o viceversa. Por lo pronto en las últimas mediciones continúan en tercer lugar y con dirigentes como Gabriela Cisneros no se ve como logren salir de ahí. Es mi opinión, al tiempo.
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