De la familia de las Amaranthaceae, el epazote es un sello de identidad de la comida mexicana, además de contar con muchos usos más.
Esta hierba es empleada en la cocina tradicional del centro, sur y suroeste del país, prácticamente es indispensable en guisos como los frijoles de olla, caldo de gallina, caldo tlalpeño, mole verde y de olla, también es ingrediente del chilpachole, de la sopa de elote y tortilla, los papadzules, sin dejar de mencionar a los esquites, las salsas verdes, los chilaquiles, entre muchas otras delicias.
El epazote es una de las plantas indígenas de México más apreciadas, tanto por su sabor como por sus propiedades medicinales. Sus usos y propiedades eran conocidos por aztecas y mayas quienes lo utilizaban ampliamente como condimento, actualmente su cultivo se ha extendido a muchos países de Latinoamérica, dejando a su paso un sabor inigualable.
Dentro de sus propiedades medicinales destacan el disminuir los dolores menstruales (cólicos), estomacales e intestinales; asimismo, elimina los parásitos, calma el nerviosismo excesivo, descongestiona las vías respiratorias y aumenta la producción de leche materna.
Cabe destacar, en el uso medicinal del epazote, que éste contiene un aceite (ascaridol) que consumido en grandes cantidades resulta muy tóxico, por lo que se sugiere su uso en forma moderada.
En México la producción anual de epazote es de más de dos mil toneladas. Los estados productores son Puebla. Tlaxcala y Estado de México.
Por otra parte, el epazote es una excelente opción para el huerto familiar, ya que se adapta a varios tipos de clima que florece en el otoño e invierno