Buró Político/El Ciudadano MEADE
Por Ariel Vilchis
A los priistas les urge que llegue el 18 de febrero, día en el que habrán de sesionar en asamblea electiva de delegados y por fin contar con candidato presidencial. Le urge terminar con especulaciones, como la que ha circulado por diversos medios informativos nacionales, que mencionan que su precandidato no prende. Que el aspirante presidencial, cinco veces secretario de Estado, será sustituido. Tales dichos no le abonan en nada a la estrategia de encumbrar a José Antonio Meade Kuribreña como candidato de la coalición Todos por México integrada por el PRI-PVEM y PANAL.
Lo cierto es que en su visita a Baja California Sur el precandidato del PRI a la presidencia de la republica José Antonio Meade Kuribreña cumplió con el acercamiento con la militancia priista, al final de cuentas ese es el objetivo de la precampaña, y no el de aglutinar a miles ni convencer ciudadanos, no por ahora.
Así que la tarea fue cumplida en dos eventos en los que el aspirante primero compartió el pan y la sal con la clase política priista en el cual tuvo oportunidad de compartir su mensaje, hacer mención de su conocimiento del Estado y lo que requiere éste para que continúe en crecimiento.
El otro evento se llevó a cabo en un conocido salón de eventos con militantes tricolores que abarrotaron el local en el que cientos esperaron afuera pacientes a que terminara el acto para saludar al precandidato, mientras en el interior un Meade Kuribreña muy a su estilo, con tono tranquilo se dirigía a los asistentes para pedirles su respaldo en busca de la tan ansiada candidatura.
Es cierto, como bien lo mencionó mi amigo y colega Don Víctor Octavio García en una de sus columnas recientemente publicada, en la visita de José Antonio Meade hubo selfies, muchas selfies, y es precisamente en esas postales que se puede apreciar que, en primer lugar, la fiesta priista en Baja California Sur la dirige Isaías González Cuevas, senador y líder nacional de la CROC que junto a su grupo de colaboradores y la dirigencia del PRI que preside Gabriela Cisneros, coordinaron la agenda del precandidato y muy seguramente también coordinarán la repartición de la candidaturas y por supuesto llevaran mano. En segundo lugar, no hubo señales claras que manifestaran quién o quiénes pueden figurar en posibles candidaturas. No hubo las clásicas señales de antaño a la vieja usanza. No al menos en los eventos ni en los discursos.
De tal suerte que el ciudadano Meade cumplió con la agenda, hizo lo que dice el librito de la política con una particular manera, tomando una sana distancia del estereotipo del político que arenga a su audiencia, que busca reflectores y promete y se compromete con discursos encendidos de retórica. Esa parte es quizá la que no entiende el priismo, el que no termina por comprender que su precandidato no es como la mayoría tricolor quisiera, pero es lo que el PRI necesita para dar la batalla electoral contra las otras fuerzas políticas del país.
Al PRI le urge tener candidatos, le urge dejar atrás la incertidumbre que genera no tener una ruta definida, ya que los tengan, al menos podrán saber con qué cuentan, con quién se cuenta y para qué les alcanza. Mientras eso no suceda la ola especulaciones, las voces inconformes seguirán desestabilizando a la de por si diezmada imagen del partido que gobierna el país, es mi opinión, al tiempo…
Entre líneas.
Sectores inútiles CNC, CTM y CNOP
Interesante sería saber cuántos ejidos de los poco más de 60 que tiene el estado, se encuentra afiliados a la CNC y cuántos miembros aglutina de estos la antes poderosa central campesina que dirige en la entidad Ramón Alvarado, según nos comentan previo a la visita de su precandidato presidencial recibió severo regaño del delegado nacional del CEN del PRI, el senador Aarón Irizar, por no comprometerse al menos a aportar un camión de redilas lleno de campesinos afines al proyecto. Lo mismo pero más barato dice el comercial, le sucede al regidor cabeño y seudo líder de las organizaciones populares Jesús Flores, quien busca, pide, exige una diputación federal de la cual seguir colgado del presupuesto sin trabajar, pero eso sí, no llena con más de tres cnopistas su flamante pero ya no tan nueva camioneta, del tal suerte que flaco favor le hizo a su precandidato al presentarse solo al evento del casino bellavista. Por último pero no menos trascendente, fue el espectáculo que brindó Amadeo Murillo, líder de la CTM en BCS, al terminar el evento de José Antonio Meade le reclamó la poca participación y espacios que le dieron a su sector para manifestar su apoyo al candidato, seguramente con los cinco acarreados que llevó al evento los gritos de euforia hubieran dejado sordo al precandidato. ¡Ah qué sectores del tricolor tan graciosos! no tienen nada, no representan nada pero piden y exigen como si se les debiera algo…
Comentarios a rostrosyperfilesbcs@gmail.com
