Cada vez se hacen más intensas y recursivas las estrategias para que las personas dejen de ver como autómatas sus teléfonos móviles y aprecien la vida desde otras dimensiones; la lectura por excelencia es una de ellas.
Víctor Miron impulsó en este sentido, una llamativa campaña en Rumania, que consiste en estimular a los viajeros del transporte público con la gratuidad de su boleto, si van leyendo durante su trayecto.
Miron, amante de los libros, llevó la propuesta al alcalde de Cluj Napoca, quien la aceptó inmediatamente y de hecho ha tenido una gran acogida entre los rumanos.
En contexto
No es la primera campaña que propone Miron en este sentido: también promovió otros proyectos como “Bookface”, en el cual las personas que tienen un libro en su perfil de Facebook reciben descuentos en diferentes tipos de establecimientos, desde librerías hasta salones de belleza.