Uno de los 23 asesinatos ocurridos en esta capital entre el martes y miércoles llamó especialmente la atención.
Raúl Robles, especialista en “seguridad informática ofensiva” se encontraba en la calle de Libertad, en su cruce con Bruselas (en la Zona Rosa), en la colonia Americana.
Desayunaba junto con su padre en el restaurante Café 22 cuando un sujeto que llevaba su rostro cubierto con un pasamantañas le disparó en cinco ocasiones.
Terminado el desayuno, Robles tenía programado impartir uno de sus cursos de seguridad en internet.
Ahora se sabe que la víctima era dueño de Hacking México, una firma con sede en la Ciudad de México y según el portal de esa empresa era fundador y presidente de la empresa que también publica la revista que lleva el mismo nombre: Hacking México.
Robles ofrecía cursos de capacitación para instituciones gubernamentales como la Procuraduría General de la República (PGR), el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), así como a diversas universidades del país y organismos como Pro-victima, según la información disponible en internet.
En torno a su currículum se asegura que el empresario estudió ingeniería en Sistemas Computacionales en el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y realizó estudios de maestría en Estados Unidos.
Fuera de control
La cifra de muertos trasladados a las instalaciones del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) sólo entre martes y miércoles fue de 23 personas.
La cifra, según Rogelio Barba, analista de la Universidad de Guadalajara está fuera de cualquier proporción pues según organismos internacionales como la ONU indican que una cifra de 10 crímenes por cada 100 mil habitantes en un año es una cantidad que puede considerarse como normal.
Y el índice aplica para grandes centros urbanos como es el caso de la zona metropolitana de Guadalajara, pero el promedio anual se duplicó en menos de dos días.
El miércoles pasado Apro informó de siete ejecuciones registradas en menos de 24 horas en la zona metropolitana de Guadalajara pero en las últimas horas se sumaron más.
Entre las recientes ejecuciones está la registrada la noche del miércoles en el cruce de Periférico y Mariano Otero, una pareja que se encontraba en el interior de una gasolinera fue atacada a balazos por individuos abordo de tres vehículos diferentes. La mujer fue identificada como Esthela Carolina Ávila, venezolana de 34 años de edad, del hombre se desconoce su identidad.
El mismo día otro individuo de 18 años de edad quien regresaba de la Feria Internacional del Libro fue asesinado en el cruce de Isla Raza e Isla Antigua, en el sur-poniente de Guadalajara. Según las autoridades el homicida atacó a su víctima con un arma blanca, en un intento por robarle la cartera y un teléfono celular.
Además la Fiscalía General de Jalisco reconoció que en Teuchitlán aseguró un rancho donde se encontraron nueve cadáveres e investiga sobre la ubicación de otros tres hombres que presuntamente perdieron la vida en el mismo lugar. Según el IJCF en total 23 cuerpos han sido recibidos en sus instalaciones sólo en entre martes y miércoles.
