La salud de los ecosistemas marinos, en estado crítico, reconoce Naciones Unidas
Durante la Conferencia de los Océanos, en su Resolución A / RES / 71/312 – Nuestro océano, nuestro futuro: llamado a la acción las Naciones Unidas suscribieron en junio de 2017 una serie de compromisos para apoyar la aplicación del Objetivo 14 de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030, con la plena participación de la sociedad civil y otras partes interesadas, para conservar y utilizar de manera sostenible nuestros océanos, mares y recursos marinos.
En ese documento, líderes y representantes gubernamentales reconocen que la salud del océano se encuentra en estado crítico pese a su contribución vital en la erradicación de la pobreza, la seguridad alimentaria mundial, la salud humana, el desarrollo económico y su papel de freno al cambio climático.
Las grandes masas de agua del planeta, advierten, están cada vez más amenazados, degradados y destruidos por las actividades humanas que reducen su habilidad para proporcionar su apoyo crucial a nuestros ecosistemas.
Además, crece la presión sobre los ecosistemas costeros y marinos por el aumento de las comunidades que viven en las costas y agregan mayor estrés en sus recursos, tendencia progresiva por el previsible aumento de población.
Los países firmantes reconocen la necesidad de abordar los impactos adversos que afectan la capacidad crucial del océano para actuar como regulador climático, fuente de biodiversidad marina y proveedor clave de alimentos y nutrición, turismo y servicios ecosistémicos, motor del desarrollo económico sostenible y crecimiento, por lo cual ponen en relieve la importancia del Acuerdo de París.
Reconocen que el bienestar de las generaciones presentes y futuras está inextricablemente ligado a la salud y productividad de nuestro océano, por lo cual llaman a conservar y utilizar de manera sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible a través de medidas urgentes como:
· Desarrollar el Objetivo 14 de forma integrada y coordinada, e impulsar políticas y acciones que consideren los vínculos cruciales, las posibles sinergias entre el Objetivo 14 y otros objetivos, en particular los oceánicos.
· Fortalecer la cooperación, coherencia de las políticas y coordinación entre las instituciones de todos los niveles, incluso entre organizaciones internacionales, organizaciones regionales e subregionales e instituciones, arreglos y programas.
· Fortalecer y promover asociaciones efectivas y transparentes de múltiples partes interesadas: asociaciones público-privadas, gobiernos en los órganos y programas mundiales, regionales y subregionales, comunidad científica, sector privado, comunidad de donantes, organizaciones no gubernamentales organizaciones gubernamentales, grupos comunitarios, instituciones académicas y otros actores relevantes.
· Desarrollar estrategias integrales para crear conciencia sobre la importancia natural y cultural del océano, así como sobre su estado y función, y mejorar el conocimiento del océano, incluida su importancia para el desarrollo sostenible y cómo se ve afectado por las actividades antropogénicas.