Uno de los modelos más icónicos en la industria automotriz es el famoso “Vocho” de Volkswagen, el cual podría llegar próximamente a los mercados pero no con la marca alemana si no con la marca china ORA Motor.
El modelo Beetle, y mejor conocido como “Vocho” de dos puertas logro colocarse entre uno de los favoritos por toda la gente, su producción se detuvo en 2003, aunque varias unidades siguen rodando en diferentes países.
La nueva versión eléctrica de este modelo podría llegar próximamente a los mercados, con la marca china ORA Motor, propiedad del conglomerado Great Wall Motors, el cual lanzo Ora Motors en agosto de 2018 como una marca de vehículos eléctricos; Las fotografías del Punk Cat, un vehículo de cuatro puertas, asientos de cuero blanco, salpicaderos cromados y de madera y pantallas digitales, han dado la vuelta al mundo debido a las similitudes con el icónico modelo de Volkswagen.
La presentación de dicho vehículo, causo gran controversia sobre los derechos en la industria automotriz china, un tema que ha sido contante en las últimas décadas pues las marcas chinas suelen sacar imitaciones de diversos modelos pero a precios más bajos.
Uno de los factores importantes para que la industria china automotriz creciera a gran medida es que los fabricantes locales no procuran la investigación y desarrollo, más bien se inclinaron en copiar el diseño de los automóviles occidentales y ofrecerlos a precios más bajos
“China es muy conocida por su cultura de imitación, desde teléfonos móviles hasta ropa, zapatos y carteras, e incluso arquitectura”, explica Gerardo San Román, director de la consultora Jato. “No es que los chinos carezcan de imaginación para pensar en sus propias ideas: la copia en China se remonta a siglos atrás. Era muy común en el arte y la artesanía tradicionales imitar las obras de un maestro como un método de estudio”.
Cabe señalar que china además presenta diversas demandas por violación a derechos de autos y competencia desleal, pues al momento de crear automóviles más económicos su mercado aumenta, sin innovar tecnológicamente o crear modelos propios.
A pesar de las denuncias y las críticas, algunas empresas chinas continúan imitando a los automóviles occidentales. El último es el Punk Cat de ORA Motor. En medio de la indecisión de Volkswagen de resucitar a uno de sus modelos más emblemáticos como un eléctrico -así como lo ha hecho con su combi eléctrica ID Buzz-, la joven marca china ha intentado hacerlo.
Tras la revelación del modelo, la matriz de Volkswagen hizo pública una postura: «Como siempre, verificamos cualquier violación de los derechos de diseño o modelo de utilidad de Volkswagen AG y nos reservamos el derecho de emprender las acciones legales necesarias»
