BURÓ POLÍTICO/ INSABI ¿OCURRENCIA DE LA 4T?
POR ARIEL VILCHIS
Lo deseable es que, tarde que temprano, el nuevo modelo de Salud denominado Instituto Nacional de Salud para el Bienestar (INSABI) funcione. Que realmente funcione porque, de lo contrario, quienes sufrirán las consecuencias de la desaparición del SEGURO POPULAR será la población más vulnerable.
La verdad no se puede entender que el gobierno federal desmantele las instituciones solo por capricho. El Seguro Popular, junto con los servicios de salud del ISSSTE e IMSS, ya tenía cubierto al 90% de la población brindando un servicio de calidad. Y si el pretexto es el combate a la corrupción, pues entonces debieron enfocarse a desprender los eslabones de corrupción que seguramente existían en las instituciones de salud, pero no cambiar de manera abrupta un modelo que a todas luces funcionaba.
Hoy se le suma, al desabasto de medicamentos del año pasado, un INSABI que ha iniciado con mentiras. Siendo la principal que los servicios de salud serán gratuitos cuando no será así. Si tienes gripa o un dolor de estómago no habrá problema, la atención está garantizada y la dosis de paracetamol también.Es decir, el INSABI se compromete a cubrir el primer y segundo nivel dejando fuera la atención especializada,como lo son cirugías mayores, y las atenderá solo si tiene presupuesto para ello. Aquí vale la pena recordar que los diputados de morena aprobaron hacer uso del presupuesto del seguro de gastos catastróficos por 40 mmp con los que contaba el Seguro Popular para la atención de pacientes con cáncer y cirugías mayores,por citar un ejemplo.
La desinformación que ha generado el gobierno federal es alarmante en un tema tan delicado. El presidente Andrés Manuel López Obrador insiste en que la atención médica será gratuita y que con solo presentar la credencial y el curp serán atendidos, sin excepción, todas las personas que se encuentren en territorio nacional aun siendo extranjeros. Sin embargo, no se ha tocado el tema del abasto de medicinas o la calidad de los servicios que se presten en las instituciones de salud; sobre todo por la centralización de las decisiones ya que el nuevo modelo concentra toda decisión en la ciudad de México. Regresando, una vez más, a la toma de decisiones a miles de kilómetros y desde un escritorio como en los años 70´s.
A nivel nacional, distintas voces se han pronunciado con más dudas que aciertos del INSABI. Las hay incluso dentro del ala dura de morena que defienden a capa y espada, pero también en morena hay quien se ha pronunciado con preocupación sobre el tema de lo que se cobrará a la gente, como es el caso de la diputada Miroslava Sánchez Galván presidenta de la Comisión de Salud, quien se ha pronunciado por evitar que no se genere en la gente una expectativa de que no se cobrará por los servicios de salud, cuando así será.
El diputado federal por Baja California sur Rigoberto Mares también se ha pronunciado acerca del INSABI, quien ha señalado la irresponsabilidad del gobierno federal al enfocarse en sus proyectos clientelares y no en los verdaderos problemas de las personas más vulnerables en temas tan sensibles como lo es la Salud. Ya que en el nuevo modelo de salud no habrágarantía de atención médica y se podrá negar la prestación de servicios, como ya está ocurriendo.
Por otro lado, en nuestra isla Baja California Sur, el gobernador del estado Carlos Mendoza Davis ha señalado que el servicio de salud está garantizado para aquellos pacientes que no cuentan con seguridad social tal y como ocurrió el año pasado en tanto no se definan las reglas de operación del INSABI.
Con la salud no se juega y si el nuevo modelo de salud del gobierno federal termina siendo ineficiente, quienes se verán más afectados serán las familias que menos tienen. El gobierno de AMLO tiene la responsabilidad de informar de manera clara y precisa a la ciudadanía qué es lo que está sucediendo con el INSABI, ya que, al día de hoy, no es lo que prometieron. Más pareciera una ocurrencia de la 4T.Es mi opinión, al tiempo…
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