La Fiscalía del estado de Sao Paulo presentó este miércoles una denuncia formal contra el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva por los delitos de ocultación de patrimonio y lavado de dinero, en cargos independientes a la investigación por el escándalo de corrupción de la empresa estatal Petrobras durante su periodo y el de la actual presidenta Dilma Rousseff.
Una fuente del Ministerio Público del estado sureño confirmó a la agencia de noticias francesa AFP que se trata de “una denuncia por ocultación de bienes en relación al tríplex en Guarujá (Balneario a hora y media de Sao Paulo). Mañana jueves se darán más detalles, pero es por eso. Y ocultar bienes es una forma de lavar dinero de origen ilícito”.
Ahora, un tribunal del poder judicial decidirá si acusa formalmente al expresidente, quien ha negado en varias ocasiones ser el dueño del inmueble, oficialmente a nombre de la compañía OAS, constructora involucrada en un fraude a Petrobras.
La acusación sucede días después de que la policía allanara varias propiedades de da Silva, que condujeron a su detención por unas horas para realizarle un interrogatorio.
Por su parte, el departamento de Justicia de Curitiba, instancia que lleva a cabo parte de la investigación de Petrobras, informó que “hay evidencias de que el expresidente Lula recibió valores oriundos del esquema Petrobras por medio del envío y reforma de un apartamento tríplex y de una finca en Atibaia, de entrega de muebles de lujo en las dos propiedades y de almacenaje de los bienes por una empresa de transporte”.
